Reflejo Ámbar

Cálida, suave, con luz tenue y carácter.

€1250.00

En una tarde de otoño, Inés, una fotógrafa de luz natural, descubrió que el sol no siempre se muestra igual. A veces, justo antes de desaparecer, se vuelve ámbar. No dorado, no naranja. Ámbar. Ese instante breve, donde todo parece suspendido, lo llamaba “la hora que recuerda”.

Inspirada por ese momento, diseñó una mesilla con vetas suaves y bordes redondeados, como si la luz la hubiera acariciado. La llamó “Reflejo Ámbar”, porque no era solo un mueble, sino una forma de capturar lo efímero. Una pieza que no ilumina, pero refleja. Como un recuerdo que no se ve, pero calienta.

Artemisa convirtió esa idea en una mesilla que transforma cualquier rincón en un refugio. Un reflejo de lo que fue, y de lo que aún puede ser.